Con diálogo avanzamos

Es un hecho que cuando en Chile las voluntades se aúnan por el bien del país, dejando de lado las diferencias políticas, el objetivo se logra.

Una muestra más de esa convicción ciudadana, la tuvimos esta semana en la Comisión del Trabajo en el Senado de la República. En esa instancia, el Gobierno del Presidente Gabriel Boric consiguió la aprobación unánime del Proyecto de Ley Conciliación de la Vida Laboral, Familiar y Personal, iniciativa ingresada el 17 de julio en el Congreso para su tramitación.

Este hito demuestra que hay un consenso a nivel político de que el trabajo en Chile, se debe encaminar hacia nuevos estándares que permitan su compatibilización con la vida familiar y crecimiento personal. Un sano equilibrio es lo que se busca, apuntando a que haya trabajadores y trabajadoras más felices y realizados, superando con ello la visión que los concebía sólo como una mera máquina de producción.

El diálogo social ha sido vital en el avance de este proyecto de ley, cuyo próximo paso será su votación en la Sala del Senado, para después ir a su último trámite en la Cámara de Diputados.

Lo más relevante de esta propuesta es el reconocimiento a la necesidad de compatibilizar las labores de cuidado de niños y niñas y de personas con discapacidad o con dependencia severa y el establecimiento de la modalidad de trabajo a distancia o teletrabajo para estos casos.

La voluntad de ir por la vía de los acuerdos, es un camino que ya ha tenido frutos en estos 18 meses de Gobierno. Gracias a ello se han logrado 2 leyes muy relevantes para el mundo laboral: reducción de la jornada a 40 horas y una política de salario mínimo para este bienio.

Estos logros nos revelan que es posible pensar en que contaremos también con una ley que concilie el trabajo con la vida familiar y personal, donde se garanticen tres principios básicos: parentalidad positiva, corresponsabilidad social y protección a la maternidad y paternidad.