Han sido meses difíciles para nuestro país producto de una pandemia que no ha tenido una gota de compasión con los esfuerzos que como sociedad hemos realizado para combatirla.
Hemos sufrido los efectos del covid-19 en diversas áreas de nuestra vida, uno de ellos es en la limitación de la movilidad entre ciudades a nivel nacional e internacional. Como región, hemos visto las consecuencias de esta prohibición en el ámbito laboral pues, durante años Atacama ha destacado por ser la tierra prometida para cumplir los sueños en base al esfuerzo y dedicación laboral de muchos compatriotas; sobre todo para desarrollarse en sectores productivos como la minería y la agricultura. Producto por lo cual llegan miles de trabajadores de diferentes partes de Chile a buscar un mejor pasar en nuestras tierras, opción que hoy se ha visto limitada por los cordones sanitarios y las cuarentenas obligatoria que rigen a algunas ciudades de nuestro país.
Sin embargo, invito a que veamos el vaso medio lleno, porque esta acción ha permitido a las empresas que tienen faenas y desarrollan proyectos en la región a contratar mano de obra local, por la necesidad de seguir ejecutando sus obras.
Esta medida ha permitido dar una opción para postular a atacameños y atacameñas a puestos laborales y ellos han demostrado que son tan buenos trabajadores como aquellos que dejan sus tierras para cumplir sus sueños.
No queremos limitar la opción de las personas de otras regiones en materia laboral, lo que queremos es que las empresas den la oportunidad y opten por mano de obra local porque nuestros trabajadores tienen sueños que cumplir, tienen familias que mantener y por, sobre todo, tienen las ganas de aplicar los conocimientos que poseen y adquirir nuevos aprendizajes de manera constantes.
Hoy, debemos comenzar a decirle SÍ a la mano de obra local, Si a nuestros atacameños, creamos en nosotros y apoyémonos conjuntamente para derrotar esta crisis sanitaria.