Valparaíso.- Con un rotundo “no” al trabajo infantil, se conmemoró en la región de Valparaíso el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, instituido en el año 2002 por la Organización Internacional del Trabajo, OIT, y que contó con la asistencia de estudiantes de establecimientos municipales de Valparaíso y menores de los hogares “Arturo Prat”, María Goretti” y “Padre Pienovi”.
Esta actividad fue organizada por la Secretaria Regional Ministerial del Trabajo y Previsión Social, Lavinia Ceballos Díaz, en su calidad de presidenta del Comité para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y Adolescente para la Región de Valparaíso.
En la oportunidad, la Seremi hizo una reseña de lo que es el trabajo infantil, según definición de la OIT: “como toda actividad laboral que es física, mental, social o moralmente perjudicial o dañina para el niño e interfiere en su escolarización; privándole de la oportunidad de ir a la escuela; obligándole a abandonar prematuramente las aulas, exigiéndole que intente combinar la asistencia a la escuela con largas jornadas de trabajo pesado”.
“Cuando por trabajar un niño, niña o adolescente pierde un promedio de dos años de escolaridad, esto le significará a largo plazo, un 20% menos de salario durante el resto de su vida adulta”.
“La perdida de años de educación, dijo la Seremi Ceballos, se traduce en una mayor probabilidad de continuar el ciclo de pobreza de generación en generación”.
Una reflexión similar hizo la Secretaria Regional Ministerial de Educación, Patricia Colarte, denunciando que el país “hay 100 mil estudiantes, entre 6 y 17 años, que han desertado del sistema escolar”. Hecho que preocupa a las autoridades, “porque los niños deben estudiar, para poder ser libres”, graficándolo con las aves, a las que si se les corta las alas (en el ser humano, es dejar de estudiar), “no pueden volar”.
En esta actividad realizada en el teatro del Edificio Luis Cousiño, sede DuocUC, se contó con la participación de la Orquesta Sinfónica Infantil de los Andes, bajo la dirección del maestro Mario Brignardello Arellano, que impresionó y deleitó a los casi más de 200 asistentes a este evento.